La Santa Infancia está preocupada: “Estás demasiado delgada”, me dicen.
_ No es para tanto, más delgados estáis vosotros -respondo, apoyándome en la evidencia.
_ Ya, pero tú tienes la muñeca igual que la mía, y yo tengo doce años -alega A., que también es muy empírico él.
A la Santa Infancia le gusta analizar cualquier mínima incidencia en mi físico. Y comienzan a hacer hipótesis:
_ Tienes la tripa hacia adentro, como los tuberculosos
_ No toso. No tengo tuberculosis
_ Tienes las mejillas marcadas, como los del HIV/AIDS
_ Tengo la vida emocional de una piedra de río. No puedo tener Sida.
B., con su habitual pragmatismo, ha sentenciado:
_ Es que piensas demasiado. No tienes que pensar tanto.
A B. le gustaría que me volviera tonta, feliz y ortodoxa. Por ese orden.
Al final, A. ha dado con la solución:
_ Ya lo tengo. Tú te vas a tu casa, con tu familia, y ahí te engordas.
Los demás lo han mirado raro. Al fin y al cabo, hace sólo tres meses que me pillé cuatro días libres para ir a Harar.
A. se repone rápidamente:
_ Y, una vez que te hayas engordado, tolo nei (ven deprisa).
Y ahí sí hemos encontrado el quórum. Sobre todo yo, porque las señales comienzan a acumularse: hace un mes se me paró el reloj y hace dos días se me rompieron las gafas
Pues eso, a engordarme voy. Que a todo cerdo le llega su San Martín. Y su San Lorenzo, en mi caso. Nos vemos en los bares.
Vacaciones, entonces? Disfrútalas y engórdate, que para eso están!
Salud,
Nür
Pues tus niños tienen razón, aunque digas que vienes por las fiestas, vienes para engordarte, jaja!!!! Que listos son estos niños tuyos… Que ganicas tengo de verte.
pues nada niña que te tenemos unos días de puesta a punto general. Yupi!!! este año podríamos hacernos la pedicura o alguna tonteria por el estilo. Pa modernas nosotras.
Vete preparando las cañitas que mañana nos vemos
Seguro que pones el reloj en hora enseguida. Tengo la sensción de que has encontrado un sitio donde quieres estar. Hemos disfrutado mucho la otra noche en Sidist Kilo, nos quedó pena no haber ido a Mekanisa. Tal vez la próxima vez…
Besos. y recuerdos a Anna.
Hola, me gustaría contactar contigo via email, estoy planeando un viaje a etiopia para realizar un trabajo sobre infancia y discapacidad y me vendría genial un poco de asesosamiento de campo. Te dejo mi correo electrónico por si pudieras ponerte en contacto conmigo, Gracias.
lourdesdevicente@gmail.com
Me encanta leer tu blog para conocer un poco más al pueblo etíope. Quisiera ponerme en contacto contigo para ver si me puedes aclarar un poco que hay de cierto en lo mal que lo estan pasando las jovenes mujeres etíopes que emigran a Emiratos Arabes.
Gracias