THE CITY AND… THE CITY
Hoy vamos a hablar de La Ciudad. Addis Abeba. Me ha costado cinco años adquirir los conocimientos necesarios para redactar este post. Como saben mis amistades, una de mis grandes carencias es el sentido de la orientación. No es que Dios no me haya bendecido con el don de orientarme, no. Es que me quitó el que venía de serie.
Si alguien me preguntara por mi zona favorita (una pena que nadie me pregunte ese tipo de cosas), le respondería sin dudar: Kasanchis. Me encanta Kasanchis. Si fuera una frenji como Dios manda –es decir, con un sueldín-, me iría a vivir a Kasanchis. Estás cerca de todo y fuera de la Bole. La Bole también me gusta, pero ya que te molestas en vivir en un país que no es el tuyo, digo yo que una mínima interacción con la fauna local está bien tenerla. Y en la Bole eso no te pasa demasiado, porque hay mucho frenji suelto, y los abeshás que viven allí son más frenjis que los propios frenjis. Y que, puestos a vivir en la Bole, pues vive en la Tele Bole (que es la calle de al lado de la Bole), que es más mona y tiene menos tráfico. La llaman Tele Bole porque hay un edificio de las telecomunicaciones. Los nombres aquí son bastante imaginativos, como se ve.
Kasanchis está cerca de Bole, pero no es tan pijo como Bole. Tiene de todo, los alquileres son más baratos que en Bole y, si te aburres, siempre puedes darte un garbeo a la noche para observar la elevada densidad de prostitutas por metro cuadrado. Además, allí está La Vòtre, que es un bar como muy apañado donde celebran hasta el Oktober Fest. Y dan salchichas de verdad y cerveza de barril. He oído que a veces lo frecuentan españoles.
Después de Kasanchis, mi segundo barrio en el ránking es Piazza y sus numerosas tiendas. Un poco como Rodeo Drive. Puedes encontrar desde sillas de ruedas hasta generadores eléctricos, pasando por madera, lámparas y accesorios de fontanería. Hay una calle toda de joyerías, donde venden los míticos sistemas solares (son como planetas dorados) que se ponen las novias trenzados en los cabellos para las bodas.
No demasiado lejos de Piazza, llegas a Arat y Setdist Kilo (Cuatro y Seis Kilómetros respectivamente), que son barrios universitarios, también bastante apañados, a los que normalmente vas cuando visitas los museos de Addis. Yo recomiendo el Museo de la Universidad, que cuenta los últimos días del Emperador, que a mí me parece mucho, mucho más mono (y más limpio) que el Museo Nacional y su horrenda reproducción de Lucy, también situado en la misma zona.
¿Que dónde vivo yo? En Mekanissa, reina. En llegando a tomar por culo, sigue la peste, que llegas fijo. A mí me gusta, porque me encanta Kore, que es donde vive mi Santa Infancia, pero reconozco que esto es algo que no todo el mundo aprecia. Eso y que el barrio de al lado del basurero se llama Ayer Tena, que quiere decir El Aire de la Salud, y me muero de la risa cada vez que lo pienso. Como centros neurálgicos tenemos Koshe, el Alert Hospital y, pasado Ayer Tena, el Fistula Hospital. Museos no hay. Luz en las calles por la noche, tampoco. Pero de vez en cuando vemos carros tirados por caballos (llamados gari), que siempre te dan alegría, un poco rollo rociero. Y olé.
P.D: El título es un homenaje a Carrie Bradshaw. Mi sueño es hacerme una sesión de fotos, vestida con el tutú de Sarah Jessica, en lo más alto de Koshe. Es lo que tiene Addis, la ciudad de los sueños imposibles.